martes, 29 de octubre de 2013

El servicio a los niños comienza con la formación de los maestros. Método Montessori

 

Aprender de la OBSERVACIÓN permitió a María Montessori demostrar como el entorno puede estimular las capacidades del niño.

Además, pudo crear, con gran detalle y precisión el entorno óptimo y favorable para que esto ocurra. Los profesionales que aplican el método Montessori aportan al movimiento mundial a favor de los niños un proceso eficaz, cuyo éxito ha sido ampliamente demostrado. ¿Pero es esta una contribución suficiente y efectiva?.trans El servicio a los niños comienza con la formación de los maestros

Todos sabemos que la respuesta es NO. El legado de María Montessori no es sólo un método. Se sabe que no será suficiente con que los escritos de María Montessori estén disponibles en las universidades y en los centros de formación. La contribución de Montessori al movimiento global a favor de los niños es una práctica y una llamada a la acción.

El movimiento Montessori no está formado por un grupo de especialistas en el intercambio, desarrollo y discusión de una teoría, sino que se compone de profesionales. El movimiento Montessori está compuesto por personas que no sólo están hablando de los niños, sino que están realmente al servicio de los niños. En cada colegio Montessori, en todo el mundo, son verdaderos maestros Montessori los que practican el servicio, todos los días y para todos los niños.

La Asociación Montessori Internacional (A.M.I) es el guardián del método Montessori y el promotor de sus prácticas.

Los numerosos niños que hoy son capaces de movilizar todas sus habilidades y energía para para la construcción de un mundo mejor, de hecho, son en su gran mayoría fruto de la contribución que el movimiento Montessori ha aportado al movimiento mundial en favor de los niños.

La A.M.I está orgullosa de sus logros, pero no está satisfecha, el mensaje de María Montessori no es sólo un método de trabajo (una buena práctica educativa), es un llamada a la acción.

Hasta hoy el Movimiento Montessori ha tenido éxito en el mantenimiento de las mejores prácticas del método, pero no ha tenido éxito en su suficiente difusión, con objeto de hacer una verdadera diferencia para el mundo de la infancia.

¿Cómo podemos conseguir que más personas puedan conocer el método, que más maestros lo practiquen y sobre todo, que más niños se beneficien de él?.

Si realmente creemos en el método Montessori y creemos que su práctica hará de los niños los agentes del cambio que nos conducirá a una sociedad más armoniosa y pacífica, entonces el número de niños es importante.

Si realmente creemos que el método Montessori es una forma efectiva para que los niños ejerzan sus derechos, no podemos estar satisfechos con la actual situación, en la que sólo una cantidad limitada de niños privilegiados tienen acceso a ella. Menos aún, si tenemos en cuenta además, que la mayoría de los niños que se benefician del método viven en la parte más influyente del mundo y con demasiada frecuencia pertenecen a las clases más privilegiadas de nuestra sociedad.

Todos reclamamos que hay que ser activistas de los derechos humanos y de los derechos del niño. Estamos de acuerdo con la idea de que, cuando un derecho no es accesible a todos, es un privilegio para unos pocos. Y los privilegios conducen a la envidia, la competencia, la frustración, y finalmente, a las luchas y a las guerras.

Hay que aceptar el reto del número, de lo cuantitativo, pero…

¿Cómo llegar a la multitud?. El principal paso para conseguir más niños Montessori es tener más profesores.

EL SERVICIO A LOS NIÑOS COMIENZA CON LA FORMACIÓN DE LOS MAESTROS.

sábado, 26 de octubre de 2013

Despertar de la conciencia: 1ª Clave para una vida feliz.


Después de buscar y buscar, despues de estudiar y descubrir, de viajar, de subir y de bajar....después de eso, estas son las claves internas de la felicidad:

1ª Solo existe una realidad en la que podemos influir y la cual es la clave de la felicidad: la realidad que existe "de nuestro pellejo pa dentro", como dice mi amigo Pepe el panaero: "De mi pellejo pa dentro mando yo", esa es nuestra área de responsabilidad y nuestra tabla de salvación.

" No es lo que te ocurre, es la experiencia que generas en tu interior y la interpretación y significado como producto de ésta"

Miguel Angel Reche
Buscador de perlas

 

miércoles, 16 de octubre de 2013

20 máximas de la Educación de Paulo Freire



Nunca de forma tan sintética ha dejado Freire clara sus posturas relacionadas con la educación. Estas son las veinte máximas pedagógicas que resumen su pensamiento. Se exponen con la esperanza de que contribuyan a una Educación para la Solidaridad y a un educador solidario. El mismo Freire decía que no se puede ser educador sin querer ser persona, es decir, sin ser para la solidaridad.


1. Es necesario desarrollar una pedagogía de la pregunta. Siempre estamos escuchando una pedagogía de la respuesta. Los profesores contestan a preguntas que los alumnos no han hecho.

2. Mi visión de la alfabetización va más allá del ba, be, bi, bo, bu. Porque implica una comprensión crítica de la realidad social, política y económica en la que está el alfabetizado.

3. Enseñar exige respeto a los saberes de los educandos.

4. Enseñar exige la corporización de las palabras por el ejemplo.

5. Enseñar exige respeto a la autonomía del ser del educando.

6. Enseñar exige seguridad, capacidad profesional y generosidad.

7. Enseñar exige saber escuchar.

8. Nadie es, si se prohíbe que otros sean.

9. La Pedagogía del oprimido, deja de ser del oprimido y pasa a ser la pedagogía de los hombres en proceso de permanente liberación.

10. No hay palabra verdadera que no sea unión inquebrantable entre acción y reflexión.

11. Decir la palabra verdadera es transformar al mundo.

12. Decir que los hombres son personas y como personas son libres y no hacer nada para lograr concretamente que esta afirmación sea objetiva, es una farsa.

13. El hombre es hombre, y el mundo es mundo. En la medida en que ambos se encuentran en una relación permanente, el hombre transformando al mundo sufre los efectos de su propia transformación.

14. El estudio no se mide por el número de páginas leídas en una noche, ni por la cantidad de libros leídos en un semestre. Estudiar no es un acto de consumir ideas, sino de crearlas y recrearlas.

15. Solo educadores autoritarios niegan la solidaridad entre el acto de educar y el acto de ser educados por los educandos.

16. Todos nosotros sabemos algo. Todos nosotros ignoramos algo. Por eso, aprendemos siempre.

17. La cultura no es atributo exclusivo de la burguesía. Los llamados "ignorantes" son hombres y mujeres cultos a los que se les ha negado el derecho de expresarse y por ello son sometidos a vivir en una "cultura del silencio".

18. Alfabetizarse no es aprender a repetir palabras, sino a decir su palabra.

19. Defendemos el proceso revolucionario como una acción cultural dialogada conjuntamente con el acceso al poder en el esfuerzo serio y profundo de concientización.

20. La ciencia y la tecnología, en la sociedad revolucionaria, deben estar al servicio de la liberación permanente de la HUMANIZACIÓN del hombre.

 

martes, 1 de octubre de 2013

5 técnicas para controlar los nervios ante una presentación.

Realizada para el blog de Gonzalo Álvarez, “El Arte de presentar” sobre técnicas para controlar los nervios ante una presentación:

Antes de hablar en público ¿tienes “el estómago hecho un nudo”?, ¿se te seca la boca?, ¿tienes las manos sudorosas? Todo ello son somatizaciones de nuestra tensión y nervios previos a una presentación. Es muy habitual que nos pongamos nerviosos ante este tipo de situaciones, de hecho, en la consulta de psicología, trabajamos muy a menudo este tipo de casos, y no solo con grandes directivos que tienen que realizar presentaciones dirigidas a un gran público, sino con personas que tienen que presentar y dar directrices dentro de su equipo de trabajo, o con jóvenes, estudiantes …, quienes al realizar presentaciones en clase, en la universidad …, ven cómo los nervios destrozan su exposición.

Hoy en día, realizar una presentación es algo muy habitual, en muchos ámbitos de la vida, no solo en el profesional y en el académico. En lo personal la comunicación también cuenta. ¿Cómo podemos garantizar que nuestra intervención sea un éxito? Hay muchas variables a controlar, pero básicamente se engloban en dos grupos:

1. Preparar a conciencia la presentación

Hay que ser metódico y previsor en este sentido, y seguir una serie de pautas que nos darán confianza en nosotros mismos y nos ayudarán a aprender de nuestros errores antes de exponernos a la presentación definitiva. En este caso improvisar no suele ser buena idea. No voy a entrar en estas técnicas, ya que están ampliamente trabajadas por Gonzalo Álvarez en su blog y en su libro “El arte de presentar”.

2. Controlar los nervios durante la presentación

Podemos preparar una presentación brillante, con un soporte espectacular, pero que finalmente sea un desastre. Cuando no controlamos el nivel de ansiedad, y nos ponemos nerviosos, nuestro discurso se verá deslucido y no trasmitiremos seguridad al público.
Si nos estamos poniendo nerviosos a la hora de hablar en público es porque estamos adelantandopensamientos negativos respecto a dicha presentación.
Así que en primer lugar, habrá que ser consciente de lo que estamos pensando respecto a nuestra presentación y nuestras habilidades como orador.
Contestar estas preguntas en un papel puede ayudar:
  • ¿Cuál es mi problema?
  • ¿Cuál ha de ser mi actuación?
  • ¿Qué puedo hacer?
  • ¿Cómo lo voy a hacer?
A través de estas preguntas, podemos detectar si el problema está:
  • En que nuestra presentación no está bien elaborada, faltan videos, no estamos seguros de la veracidad de los datos, la calidad de las diapositivas no es la idónea… en ese caso, ¡manos a la obra! Debemos volver al punto uno: preparar a conciencia nuestra presentación: Comienza a trabajar en ella, hasta que esté pulida y a punto.
  • Si por el contrario, la presentación está bien preparada y tu preocupación está más, en “no les va gustar”, “quedaré en ridículo delante de mi jefe”, “si me preguntan algo no sabré rebatir la idea”, …, es hora de cambiar estos pensamientos negativos por unos positivos, como “lo he preparado a conciencia”, “creo que les va a encantar”, “sé expresarme bien, lo puedo hacer bien”, “conozco los datos, si me preguntan sabré contestar”…
Domina estas sencillas técnicas de control de la ansiedad

Podrás ir aplicando de forma secuencial estas cinco técnicas según se vaya acercando el momento de la presentación. Con ellas podrás bajar tus niveles de ansiedad antes de una presentación.
  1. Desde días antes de la presentación: la relajación muscular es una técnica que se va perfeccionando con el tiempo y la práctica, pero que, de forma resumida, consiste en ir tensando y destensando de forma consciente los músculos siguiendo un orden determinado. Lo ideal es entrenar esta técnica durante 15 días seguidos de forma sistemática, para conseguir la automatización del proceso.
  2. Cuando te imaginas realizando la exposición, ¿cómo te ves? ¿Nervioso, tropezando, no sabiendo resolver la situación…? O por el contrario, ¿eres capaz de verte realizando una presentación brillante, en la que tu público queda encantado y te da la enhorabuena? La técnica de la visualización positiva, que tanto se usa en el mundo deportivo, consiste principalmente en visualizarse realizando con gran éxito esa presentación, viéndote como realmente quieres que ocurra, y hay que hacerlo de la forma más detallada posible. Imagina la sala donde vas a estar, que ropa llevas puesta, dónde se sienta el público… para después visualizarte realizando tu presentación de forma brillante y consiguiendo tu objetivo. Al principio puede que te cueste, pero no dejes de hacerlo unos días antes del gran día, y sobre todo la noche de antes y un rato antes de realizar la exposición. Proyectar en positivo puede ser de gran utilidad para controlar la ansiedad y nos facilitará el camino hacia el éxito.
  3. Segundos antes de la exposición algo tan sencillo como beber un trago de agua antes de comenzar a hablar nos puede ayudar a conseguir un mejor rendimiento cognitivo y a reducir el nivel de ansiedad. Desaparecerá esa sensación de boca seca, algo asociado a la situación ansiógena.
  4. Finalmente, justo antes de salir a nuestra exposición, la respiración diafragmática, consiste en respirar profundamente muy despacio, llevando el aire al abdomen, y expulsar el aire muy despacio por la boca, empleando más tiempo en la espiración que en la inspiración, es una técnica para reducir la ansiedad muy eficaz en estos casos, y que está al alcance de todo el mundo, y se puede realizar antes y durante la presentación.
  5. Y recordad, lo que nos repetimos de forma constante, esas frases interiores que nos formulamos, son las responsables de nuestros estados de ánimo, así que utilicémoslas para que trabajen a nuestro favor y no en nuestra contra. No dejes de repetirte: “me va a salir bien”, “yo puedo”, “lo he preparado a conciencia”…
Si queréis saber más sobre presentaciones o mejorar vuestra formación al respecto, no dudéis en daros una vuelta por la web de Gonzalo Álvarez: “El arte de presentar